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Durante el pasado fin de semana se llevó a cabo en Sierras Bayas, un encuentro de mochileros de Autostop Argentina. Ya el viernes 15 comenzaron a llegar los primeros mochileros al camping. El encuentro comenzaba al dia siguiente, pero a las 19 horas eran casi 10 ya los viajeros que habian arribado a sierras. Entre los primeros con los que tomamos contacto, mientras estaban pegando carteles indicadores en las inmediaciones del club, estaban Carlos Nievas, quien coordinó el encuentro y Alejandro que partió desde Mar del Plata para cumplir su sueño: llegar a México a dedo. Sierras Bayas era su primer parada y punto de arranque hacia esta gran aventura. Con el correr de los dias, el numero de participantes del encuentro ascendió a 46 y vinieron desde lugares tales como Pihué, Bahia Blanca, Trenque Lauquen, Mar del Plata, Buenos Aires, Gran Buenos Aires, San Nicolás, Rosario.. y otros destinos que se me escapan de la memoria lamentablemente..
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El sábado, Julieta Portillo y Marcelo Kehler, estuvieron charlando con ellos y tomando notas graficas, lo que culminó en una muy linda nota para El Pasillo, el suple joven de el Diario el Popular. El frio se hacia notar, pero allí estaban todos poniendole mucha onda y ganas al momento :)
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Pasadas las 14, los chicos de 1º Polimodal de la Escuela Media Numero 2 de Sierras Bayas, acompañados por su profesora Karina Viboda y la preceptora del establecimiento, llevaron a nuestros visitantes a una interesante visita guiada: primero se llegó hasta la cantera de Aust, luego pasando por detrás del IPSB, los llevaron a una interesante visita guiada por el Museo de Sitio Calera la Libertadora. La cantera de lajas del centro fue paso obligado y motivo para algunas escaladas, asi como tambien la clasica competencia de hacer "patitos" tirando piedras al agua.
Luego el grupo fue guiado hasta la cantera de dolomita de Guido y Pablo Mallegni, donde este ultimo, con la simpleza y amabilidad que lo caracteriza, les explico a todos como se hace para perforar la piedra y generar bloques de gran tamaño, que una vez que logran recostarse en la "cama" de tierra que se les prepara, son transportados al parque industrial local. El frente de la cantera se veia impresionante: los ultimos minutos de sol del atardecer se reflejaban en las gigantescas moles de dolomita, haciendo que su color se viera mas bonito aun de lo que es. Todo pareció encenderse por unos instantes. El sol se ocultó y los bloques se durmieron cromaticamente hablando. Hora de pegar la vuelta, apurando el paso para lograr llegar a la cima del cerro Aguirre. Llegamos justo en el momento en que la luz comenzaba a escasear, aunque pudimos disfrutar de la vista que ofrece este mirador natural.
De allí directo al quincho. Algo calentito para reponer energias. Fogon, mateadas, baile, bar tomado (todos a la Roka!).
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El domingo era el dia del padre. Y entre los viajeros se encontraba Pedrito, de tan sólo 5 años, que acompañaba a su papa Rodrigo en su dia. La tarde los encontró terminando el almuerzo, pero aun con ganas de seguir recorriendo: querian llegar a la cima del Cerro del Diablo. Partimos hacia el Huecu Fu Hum pero la luz nuevamente nos jugaba mala pasada. Asique no entramos al Huecu Fu Hum, pero pusimos la mirada en la cima del cerro. Luego de pasar el barrio Quimico, el ultimo alambrado fue sorteado con exito y alla ibamos! una vez arriba, Fabian Perez Bemporat, quien es militar y mochilero, nos dio una charla práctica sobre cartografia. Utilizando la carta local, que fue comprada por otro mochilero en el Instituto Geografico Militar, identificamos puntos cercanos y nos pusimos a hacer mediciones y calculos. Fabian nos explicaba y nos guiaba.
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La bajada fue rápida, volvimos por Barrio Catriel, y aunque la luz del dia era ya muy poca, aun fue suficiente para que pudieramos identificar una planta de laurel en el camino, algunas de cuyas hojas termiraron seguramente en un rico guiso! :)
El lunes era feriado, pero las provisiones para la leche de la mañana ya estaban encargadas en lo de Gustavo, asique todo organizado :). Luego, a la ruta. a hacer dedo en el sentido inverso. La vuelta a casa: al trabajo, al estudio, a lo cotidiano, o a un nuevo destino o una nueva parada segun el caso.
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Mientras se trataba de encender el fuego para prepara el almuerzo, estuvimos charlando con algunos mochileros:
José Papotto, 58 años, mochilero desde los 13 :
(en breve)
María Ines, 56 años, su primer encuentro:
(en breve)
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Alejandro Rivas: un sueño, desde Mar del Plata a México a dedo
(en breve) |
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Alejandro, que viajaba hacia Mexico, a estas alturas (23 de junio) ya está en Tucuman. Y Carlos nos escribe haciendo un balance muy positivo del encuentro. Les mandamos un abrazo muy grande a todos los que compartieron este fin de semana largo en sierras! y como dicen ustedes: buenos caminos para todos!
Monica
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| fotos: www.sierrasbayas.com.ar |
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