En la Foto vemos a Gabriela y Marcelo frente a El Castillo o Templo de Kukulcán, en la ciudad maya de Chichén Itzá

Gabriela Freites es una sierrabayense que actualmente vive en la vecina cuidad de Olavarrría. En el mes de febrero del 2001 cumplió su deseo que era poder visitar México. Estuvieron con su marido una semana alli y otra en República Dominicana. Volvió encantada y nos cuenta sus impresiones:

"Xcaret es un parque arqueológico donde los turistas pueden acceder a los ríos subterráneos, allí nos bañamos, el agua era transparente, fresquita, y te lleva la corriente...casi no tenés que hacer fuerzas ara nadar. Los Cenotes son lagos subterráneos que se forman dentro de las cuevas y los Mayas los usaban para bañarse y para ofrecer sacrificios a los Dioses.

La ciudad maya de Chichén Itzá (Península de Yucatán, México), fue fundada en el 445 d.C. y habitada hasta el 1204. La estructura más importante es El Castillo o Templo de Kukulcán, cuyas escaleras rematan en dos cabezas de serpiente. Durante los equinoccios de marzo y septiembre, las sombras producidas por el sol provocan en una de las escaleras el efecto de una víbora que baja del templo.

Esta estructura piramidal de 30 m. de altura, cuenta con 4 escaleras iguales a cada lado (91 escalones cada una), que sumados al superior dan 365 (los días del año).

Según nos cuenta Gabriela, Los escalones son muy empinados, ya que el templo tiene una inclinación de 47°; por lo tanto es relativamente fácil subir, pero se dificulta la bajada. Hay que hacerlo sentándose en los escalones, o pisando de costado y apoyándose en una cuerda que hace las veces de pasamanos. Razón por la cual... algunos no se animan a subir, como Marcelo que prefirió esperar tranquilamente abajo.

En el interior, al que se accede por el costado de una de las escaleras, se encuentra el templo del jaguar, donde se puede apreciar una escultura de este felino, con incrustaciones de jade, y la estatua de Chac Mool (el dios de la lluvia).

Otros edificios importantes de Chichén Itzá son: el Templo de Xtoloc, el Templo de Venus, el Observatorio, la Casa Colorada, la Iglesia, el Templo de los Jaguares, el Templo de las mil columnas y la cancha de juego de pelota.

También visité otras ciudades mayas importantes, como Cobá (construida en la selva, fue una de las ciudades más grandes. Su pirámide Nohoch Mul es la más alta de la península, con 42 m.); o Tulum (ciudad amurallada a orillas del Mar Caribe).

A estas dos fui sola, ya que Marcelo tenía suficientes ruinas mayas por el resto de su vida".